Marcos 11: Jesús entrando en Jerusalén y saliendo (comúnmente llamado “la semana santa”)

Léase por favor Marcos 11:1-19

Como hemos visto antes, nuestro evangelista Marcos nos da los eventos en una forma cronológica más que los otros tres. La entrada de Jesús en Jerusalén marca el principio de la última semana de la vida del Señor Jesús y así empezamos en unos siete días llenos de eventos de suma importancia. Las escrituras habían profetizado en Zacarias 9:9 Alégrate mucho, hija de Sion; da voces de júbilo, hija de Jerusalén; he aquí tu rey vendrá a ti, justo y salvador, humilde, y cabalgando sobre un asno, sobre un pollino hijo de asna. Junto con otras ilustraciones en este capítulo vemos en el pollino atado una figura de la nación de Israel. Un pollino sin entretenimiento es totalmente salvaje y el libro de Job nos pinta una figura de la comparación al ser humano. De una traducción moderna, Job 11:12 El día que el asno salvaje deje de serlo, ese día el necio entrará en razón. La nación de Israel (como todos nosotros nacidos en pecado de rebeldía) era atado con la ley, y en este momento Fueron, y hallaron el pollino atado afuera a la puerta, en el recodo del camino. El recodo del camino estaban enfrente la nación. ¿Dónde iban a ir? ¿Tras su Mesías real para ser librados de la ley y entrarse en la gracia? ¿O por el camino de decir No tenemos más rey que César? (Juan 19:15) La escritura tenía que cumplirse, pero a la vez, eran responsables como les dijo Pedro en Hechos 2:23 A éste, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole.

Las voces de júbilo eran muchas, pero no se sabe si ellos eran entre los quinientos con real fe en el Señor Jesús (1 Corintios 15:6) o simplemente unos entusiasmados por el momento. Pero vemos al pollino salvaje controlado y tranquilo debajo del Señor Jesús. Así todo hombre que se arrepiente y se somete al Señor Jesús y así será con la nación de Israel en aquel día futuro. Salmo 110:3 Tu pueblo se te ofrecerá voluntariamente en el día de tu poder, en la hermosura de la santidad.

Conociendo que iba hacia la cruz, Jesús habiendo mirado alrededor todas las cosas, como ya anochecía, se fue a Betania con los doce. En Betania vivía los reales que creyeron en él, Marta, María, y Lázaro. La ciudad de Jerusalén no daba un lugar a su Mesías de descansar.

Al otro día, vemos a Jesús volviendo y viendo la higuera y fue a ver si tal vez hallaba en ella algo; pero cuando llegó a ella, nada halló sino hojas, pues no era tiempo de higos. Otra vez, vemos un ejemplo dual; uno, de la nación de Israel que tenía hojas (una profesión de piedad) pero nada de higos, o sea, fruto para Dios. Pero así es también con todo ser humano que no conoce a Jesús. Puede que tenga una profesión o religión o fingimiento de piedad, pero sin tener a Cristo como su salvador, no puede producir fruto agradable a Dios. El dicho de Jesús Nunca jamás coma nadie fruto de ti no quiere decir que Israel ha sido eliminado de los planes de Dios; solo quería decir que la antigua religión terrenal nunca iba a producir algo agradable a Dios. Solo por el nuevo nacimiento por la acción del Espíritu Santo y una nueva vida puede haber fruto; Mateo 13:8 parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.

Ahora Jesús hacia algo que había hecho una vez antes, en el principio de su ministerio según Juan 2:13-17. Parece en los 3 años y medio de su ministerio, no habían avanzado nada en su entendimiento de los principios de Jehová. ¿No está escrito: Mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones? Aunque los gentiles no podían entrar en el templo, lo que vemos aquí es el área alrededor, o pórtico del templo. Debería haber dado el testimonio de la presencia de Jehová en medio de Israel y así lugar de oración por todas las naciones. Pero en vez de eso, era un lugar de lucrar. Jehová reconocía la dificultad de viajar lejos con animales por el sacrificio, y así hacia provisión por los que vivían lejos. Y si el camino fuere tan largo que no puedas llevarlo, por estar lejos de ti el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido para poner en él su nombre … entonces lo venderás y guardarás el dinero en tu mano, y vendrás al lugar que Jehová tu Dios escogiere; y darás el dinero por todo lo que deseas, por vacas, por ovejas, por vino, por sidra, o por cualquier cosa que tú deseares; y comerás allí delante de Jehová tu Dios, y te alegrarás tú y tu familia. Deuteronomio 14:24-26 Pero, ¿Cómo iban a alegrarse cuando llegaron y vieron precios tan altos, puestos por los que veían la provisión de Dios como una excusa de ganar dinero? Como pronunciaba el Señor Jesús vosotros la habéis hecho cueva de ladrones.

No es tan difícil ver cómo lo mismo ha resultado en la profesión cristiana. La semana pasada vimos al joven rico, cuya riqueza le era ocasión de tropezar. Otra vez, viendo lo escrito por Pablo en 1 Timoteo 6 leemos hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales. El Señor ve los corazones de cada cual. Había en el evangelio de Juan los que venían a Jesús sin fe, buscando algo terrenal. Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis. Trabajad, no por la comida que perece… Juan 6:26-27 ¡Que el Señor nos ayude de ser sinceros delante de él!

Los lideres, su hipocresía revelada por el Señor Jesús, se enfadaron mucho. Buscaban cómo matarle; porque le tenían miedo… ¿Miedo de que? Miedo de perder su posición de poder y influencia sobre su pueblo. ¿Qué haremos? Porque este hombre hace muchas señales. Si le dejamos así, todos creerán en él; y vendrán los romanos, y destruirán nuestro lugar santo y nuestra nación. Juan 11:47-48 Se dice de Pilato Porque conocía que por envidia le habían entregado los principales sacerdotes. Marcos 15:10

Felipe Fournier
1 septiembre de 2024