Palabras de Aliento por Sam Ludvicek

En estos tiempos todos necesitamos aliento.  Una de las formas en que el Señor me ha llevado a animar a mis compañeros de viaje, mientras viajamos juntos a través de este a menudo triste y solitario escenario, es escribiéndoles diariamente una alentadora carta llamada «Queridos hermanos». Considero que es un gran privilegio el tener la posibilidad de hacer esto para mi Señor.

Sam Ludvicek
11 marzo de 2012